Estoy cansada y la cama no me llama, doy vueltas como sonámbula con los ojos apunto de caer, no tengo sueño, pero mi cuerpo no responde bien.
Me oculto del mundo, de las palabras, de mis sueños, añoranzas,y de los comentarios que aun adeudo en mis blogs, sucede como siempre que solo queda la música que me acompaña.
La oscuridad acecha mi vida, y las horas arrastran un pesado amanecer, parece que fuera a caer aplastándome por completo, cierro mis ojos y duermo.
Comienzan mis sueños, esos que nunca recuerdo, es extraño pero esta noche es distinta puedo acariciar tu piel con mis manos y sentirlo tan real, estoy a punto de llorar por la emoción de aquel beso que invade mis labios, por respirar pausado cuando me quedo sin aliento.
Me abrazas suavemente, protegiendo la desnudes de mi cuerpo, desatas el listón que contiene toda esta pasión que provocas con tu mirada, perdió importancia el sudor que nos empapa por completo, la humedad de mi bajo vientre te atrapa y disfruto lo bien que se siente amarte así, somos uno amor, en el portal del deseo.
Sabes lo que quiero y lo das sin llegar a esbozar palabra, te retribuyo el gesto con mis ojos de enamorada, nos apresa el deseo animal, el de este hambre carnal de querer devorándonos hasta hartar las ganas de mas.
Un sueño que parece real si sentís su calor en tu piel.
ResponderEliminarBesitos
"nuestros sueños no son más que restos de un naufragio de realidades sumergidas..."
M.Yourcenar
Soñar es gratis... pero tampoco quiero que me regalen esa frase. Quiero soñar con cosas reales que se cumplan...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Uhmmm, hoy el angel saborea los placeres de los amantes, es triste morderse las ganas en un sueño, pero seguro estoy que la vida besa en la boca de vez en cuando y se cumple, claro. Cuando llegue será mas especial.
ResponderEliminarIgual incluso no fue un sueño si quiera y pasó en ambos.
Mil besos amiga mia...
Cálido y sensual sueño, ideal para perderse en el y no despertar si fuera preciso. Hoy intentaré soñar....Sin duda ¡Lo intentaré con todas mis fuerzas!.
ResponderEliminarMuxu Mila
Creo que lo sientes tan real porque así fue...Viajas entre sueños a los brazos de tu amado.....
ResponderEliminarBesos con cariño
Seguiremos soñando porque muchas veces no hay otro asidero. Pero tampoco sería bueno perdernos en sueños irrealizables,
ResponderEliminarAmiga me ha encantado leerte.
Te mando muchos besos
A mi me gusta muhco soñar. La ente trata de limitar los sueños. Pero los sueños son la fuerza de voluntad actuando en todo su potencial, porque durante el día nos bombardeamos con "mass media" e información inutil.
ResponderEliminarEs feo, la gente no recuerda lo que sueña, o a veces no recuerda que sueña siquiera. Bah, pobres ellos, yo trato de embelesarme en ellos, perderme, dejarme abrazar.
Incluso en las pesadillas, trato de enfrentarlas siempre y no usar la salida fácil de despertar. Vences o "morir" en el intento.
Los sueños, mi vicio preferido.
P.D.: Las burradas a flor de piel tengo.
Seguro que si, es infrecuente hablar con alguien que no me diga que estoy desvariando cuando hablo de los sueños.
ResponderEliminarMe haces sentir muy a gusto con eso.
Hola Khepri, tengo el premio Mariposa que comparto con vos, en mi blog.
ResponderEliminarTe lo obsequio con afecto, un besito
Los sueños son parte de los deseos reprimidos. Así es en la realidad. Pero la literatura deconstruye ese concepto para recrear otro con la algarabía de un escarabajo.
ResponderEliminarLos Sueños se hacen realidad ...
ResponderEliminarQue hermoso blogg
Un beso
Leí esto: "Me oculto del mundo, de las palabras"
ResponderEliminarpero ya veo que su refugio en los sueños, bueno,
cualquiera quisiera estar ahí, con esos sueños.
Tengo un sueño, pero no lo cuento, porque no será visible tras la aprobación que viene como censura al texto. Un abrazo, pues, de escarabajo.
ResponderEliminarEscribes:
ResponderEliminar"sucede como siempre que solo queda la música que me acompaña."
Pero... ¿es que no te das cuenta que estoy ahí para que siempre oigas la música que te acompaña? Así te acompaño yo, hasta que me invites a tu sueño, entonces... ¿qué importa la música si para eso tenemos nuestras palabras de escarabajos?