Estaba molesta con el mundo por completo, se había desencadenado la peor tormenta que podría soportar según ella. El insistía en que la vida tiene cosas mas importante y que su molestia no tenia fundamento.
Nuevamente los celos le habían jugado una mala pasada, y confundió algo inocente, cargándolo con la gravedad que solo ella podía agregar.
Con un portazo casi a punto de derribar el muro que contenía aquella casa, salio llena de ira, y lo dejo desconcertado nuevamente, con el corazón destrozado por nada.
Había recibido un mensaje en su celular, de un alguien que no conocía de un numero que jamás había visto, un te amo que no le pertenecía, pero ella presa de la desconfianza daba todo como real, un engaño total, no había un pequeño espacio para llegar a pensar que no era así.
El salio corriendo queriendo explicar , ella no escuchaba , comenzó a correr , su loca carrera dio frente a un vehículo a toda velocidad , solo sintió el golpe y vio frente a sus ojos , como la mujer que tanto amaba , y que jamás engaño siquiera con la mirada , perdía la vida , por algo que no podía comprender .
La vida es frágil porque nosotros la hacemos así... porque no sólo la sinceridad, sino el afecto, el amor, el vivir... hacen que todo sea como caminar en una cuerda a demasiados metros de altura. Y por su puesto da mucho vértigo.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Es parte de nuestro proceso de crecimiento, dependerá la etapa de la vida en que se presenten la manera como reaccionaremos ante los celos, por algún motivo justificado, no por suposiciones.
ResponderEliminarDestruye vidas tal como lo muestra tu entrada.
Qué tengas un bonito día, besitos
Una buena historia para reflexionar..Yo jamás he sentido el demonio de los celos...
ResponderEliminarViviana te dejo besos con cariño :)
Somos frágiles, imperfectos. Creo que los celos son como una especie de enfermedad difícil de curar.
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