Por momentos trato de pensar que cada cuerpo que me rosa tiene vida, se mueven todos en la misma dirección, según la ruta del metro.
Es una mañana fría de otoño , de esas que sacar las manos fuera de los bolsillos es mas peligroso que tropezar y caer sin haberlas movido de aquel lugar .
Cubro mi cuerpo con mi bello abrigo, la suavidad que siento y ese calorcito, solo lo asemejo a mi cama tibia y segura, más cuando llueve eternamente.
Quizás el hecho que el sol se mude este día, hace que cada ser vista de pesimismo, que las miradas lleguen a rebotar en el piso, y evitamos cruzar palabras, como si fuera peligroso pedir permiso para avanzar hacia la salida.
Creo que hay días en que mi trabajo es mal pagado, en que espero con ansias recibir algo a cambio, pero no sucede, todos me evitan, es como si no existiera.
Mi meta es obtener solo una, si logro dos seria maravilloso, no solo por mí, sino también por esa otra persona.
Ya he llegado a mi estación y debo descender, te observo fijamente y logro llamar tu atención, sonrió alegremente, y tu sin pensarlo me retribuyes el gesto.
Querida amiga en ese tren vamos juntas tratando de sonreir cada día.
ResponderEliminarBesos con cariño
Lo sé, lo sé. La sonrisa es compartir vida, se da y se recibe. Hay que sonreír y no atacar, así sean molinos de vientos entendidos como gigantes: el nuevo arte de la caballería es la sonrisa.
ResponderEliminar"La felicidad la llevas escondida dentro de ti”
ResponderEliminarHe ahí el secreto del milagro Khepri; pero esas son cosas que conocemos los ángeles, por eso es nuestro trabajo.
Muy bonito, volveré a visitarte.
´Qué buen blog!!!!!
ResponderEliminarSi es que los milagros si que existen....
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Qué hermoso te devuelvan una sonrisa, es un roce de ternura entre dos almas.
ResponderEliminarTe recarga de energía positiva. :)
Besitos